De batería y de forraje
Qué armónico movimiento en tu mirar,
esos ojos de mar en calma y poco oleaje
sirven de batería y de forraje
en los días más sombríos y deshabitados.
Qué cortas son las horas en tu habitar,
esas agujas punzantes que se clavan
miden el tiempo que en la descarga
el segundero camina hacia atrás.
Qué bellas las mañanas acompañadas
sin perder de vista a la soledad,
entre sábanas rebusco la ausencia
con presencia en aroma y obviedad.
Qué efímero el paso por los cables,
eternos malabaristas de estrellas
acariciando el rocío de la noche
en tu pelo como sedal.
Tú tan onírica y yo con desvelo.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada